Ginebra tenía veintisiete años y sólo experimentaba nostalgia por el futuro y por
lo que podía suceder, y todavía podía suceder todo. Era algo tan obvio que ni siquiera
se lo planteaba. Le parecía un hecho irrefutable que su vida era un potencial casi
ilimitado. Hay personas que viven en el pasado, personas —no demasiadas: los niños
muy pequeños, los adultos cuando son intensamente felices— que viven en el
presente y personas que viven en el futuro. O quizá todos estemos a ratos en un
tiempo y a ratos en otro, según las circunstancias, o en dos a la vez, hasta el final en
que, si hemos vivido lo suficiente, sólo nos quedamos definitivamente en uno, en el
pasado.


Comentarios

  1. Es cierto, con los años se vuelve al pasado. Será por la mente que nos retorna como supervivencia o porque no aprendimos a vivir el presente...
    Precioso , como siempre...

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  2. Somos una especie ansiosa de pasado y nostálgica de futuro... Feliz semana linda!!!

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